Lo que Lalo España confesó sobre sus inicios como actor y su trayectoria

A Lalo nunca le gustó el fútbol ni el básquetbol ni ninguna actividad que incluyera un balón. En sus años de escuela, de hecho, su poca habilidad para desempeñarse en estas disciplinas lo llevó a refugiarse en las artes; en la actuación, en la poesía. Nunca imaginó que lo que comenzó como una manera de evadir a los niños que pudieran molestarlo por su poca destreza jugando, se convertiría en su carrera, su pasión y su legado.

Descubriendo su amor por la actuación

Hace cincuenta años, en el seno de una familia numerosa de Guadalajara, nació Lalo. “Sé que parezco canadiense pero soy de allá. Yo sí llegué al mundo con mi ‘torta bajo el brazo’ porque el día que nací mi papá se ganó un carro en una rifa del Día de la Independencia” contó el actor en entrevista exclusiva para Distrito Comedia.

Luego de interpretar al 'diablito' en la pastorela de su colegio y desenvolverse en otro tipo de actividades artísticas a lo largo de su infancia, a los 17 años de edad Lalo incursionó en la escuela de actuación que Televisa llevó a su ciudad natal y que estuvo a cargo de Ofelia Cano. A partir de ahí, Lalo nunca se detuvo. Sacó su licencia de locución, trabajó en radio, fue titiritero, hizo teatro infantil, teatro convencional… un poco de todo.

El día que su vida cambió

Con los ojos puestos en su objetivo de algún día llegar tan lejos como Héctor Suárez, Cantinflas, Chespirito y Tin Tan, sus ídolos, un 17 de enero de 1994 Lalo decidió dejar todo lo que conocía y cambiar la torta ahogada por la guajolota para cumplir su sueño. “La verdad llegué con el pie derecho porque Eugenio Derbez, que me había conocido en Televisa Guadalajara, me dijo que le gustaba mucho mi trabajo y que me iba a dar chamba en la CDMX. Y así fue. El día que aterricé, grabé mi primer sketch en Al Derecho y al Derbez” recuerda el actor.

Desde ese momento la pantalla no dejó a Lalo jamás. Con la convicción de que la versatilidad es algo a lo que se le debe apostar, el tapatío obtuvo papeles en algunas de las telenovelas más importantes del momento como lo fueron El Premio Mayor , Tú y Yo, Carita de Ángel, Para volver a amar -en donde interpretó a Quintín, uno de los personajes que más le ha gustado hacer en este género-, El Color de la Pasión, Para Volver a Amar, entre muchas otras. Según dijo Lalo, “mucha gente menosprecia el género de la telenovela y de verdad que es un ejercicio bastante fuerte para el actor porque necesitas una capacidad de retención, memoria y observación tremenda”. Lejos de temer a ser encasillado, el actor dice haber disfrutado mucho tener proyectos tan distintos en su hoja de vida.

Su paso por Otro Rollo y el origen de ‘Doña Márgara’

Para España, estar en Otro Rollo fue “una gran escuela y un gran parteaguas”. La oportunidad de estar en el talk show nocturno más querido de la televisión mexicana se dio cuando el hoy protagonista ‘Vecinos’, audicionó para una producción en la que Adal era el encargado de coordinar el casting. “El proyecto ya no se realizó, pero a Adal le gustó mucho mi chamba en aquel entonces” contó Lalo. Tiempo después los actores comenzaron a coincidir en los pasillos y un buen día, Adal lo invitó a hacer un sketch que, posteriormente, le abriría la puerta a formar parte del elenco base. “Yo acababa de hacer ' La Guereja' en 1998, y en 1999-2000 fue que empecé a hacer cositas con Adal hasta que ya ahí me quedé. Casi cinco años estuve por allá”.

Adicional a todo el cariño, los aprendizajes y la experiencia que le trajo estar en una de las producciones más disruptivas de la época, Otro Rollo también le dejó -y nos dejó- a uno de sus personajes más emblemáticos: la queridísima Doña Márgara Francisca. “Nosotros hacíamos una parodia de Big Brother que se llamaba ‘El Gran Carnal’. En la primera entrega hicimos personajes estereotipos como el fresa, la persignada, etc. y tuvo tal éxito que los ejecutivos de Televisa nos pidieron una segunda parte donde ya cada quién hacía la propuesta de su personaje. Ahí se me ocurrió crear a Doña Márgara. Le escribí su biografía, se la propuse a Adal y al equipo y les encantó” relató España, quién también admitió jamás haber imaginado que su personaje fuera tan bien acogido que le valdría seis temporadas de su propio programa en Telehit con un alcance de más 50 países.

Además, Lalo dijo estar contento con lo que Doña Márgara ha significado para comunidades como la LGBTIQ+, siendo que es un personaje que defiende a capa y espada a su hijo homosexual, así como para las madres solteras que ven en Doña Márgara un reflejo de lo que ellas han vivido. “Dentro del humor y chacoteo de este personaje hay muchos elementos que buscan acompañar a estas comunidades (...) Doña Márgara me ha dado muchísimas satisfacciones” dijo España.

‘Vecinos’, su mayor satisfacción

Hace 16 años el público mexicano pudo reír, por primera vez, al son de Germán y todos los vecinos del edificio 443. De acuerdo con Lalo, fue en el 2005 cuando Eugenio Derbez y Elías Solorio lo llamaron para hacer el casting y grabar un programa piloto para los ejecutivos. “Yo siempre lo he dicho, si yo me hubiera visto en ese momento te juro que no me contrato. Hay que ser objetivos y la verdad no me gusté nada al principio (...) Ahora ya me siento como pez en el agua porque fui agarrándole la onda al proyecto y me enamoré de él, pero al principio estaba todo tieso” confesó con humor el actor.

Dentro de los miles de momentos que ‘Vecinos’ le ha regalado, hay uno que Lalo dijo haberle movido todo por dentro. Por medio de Twitter, el actor se enteró que un pequeño que cumplió años quiso hacer su fiesta con temática de Germán, el conserje. “Pudo haber escogido que su fiesta fuera de cualquier superhéroe, pero no, ahí estaba con su pastel con mi imagen como Germán, con su playerita, su gorrita y todo. Su familia igual se vistió de los personajes, su mamá era Doña Magda, su papá era Luisito... te juro que me sacaron las lágrimas”.

De todos los proyectos en los que Lalo ha participado en sus 25 años de carrera, el actor afirma que Vecinos ha sido, sin duda, “el que se gana el trofeo de buena vibra, alegría, disfrute y buena atmósfera. Es una familia”.

Sobre comedia y sueños por cumplir

Crear personajes tan memorables no es tarea sencilla, pero el actor tapatío ha descubierto que la observación es una de sus mejores aliadas. Desde su madre que le dejó la famosa frase “Jesús del Huerto” que adoptó Doña Márgara, hasta su conserje Don Luis, que fue su principal inspiración para Germán, el comediante ha aprendido a extraer elementos de la gente a su alrededor para construir sus personajes y darles el equilibrio perfecto entre credibilidad y humor.

En un mundo cautivo por las redes sociales, Lalo considera que el gran reto de la comedia y los comediantes actuales es atraer y retener la atención de un público cuya naturaleza se inclina más por ser disperso. “Está bueno que surjan standups, sketches y todo, pero es importante que aprendan a observar los momentos actuales y se preparen, porque luego hay gente que nomás quiere ser famosa y quiere tener likes, pero no tiene idea de por qué lo quieren” expuso el actor.

Con medio siglo de vida y la mitad de éste dedicándose a las artes escénicas y en gran parte, a hacer reír a la gente, Lalo considera que aún tiene muchas cosas por hacer y nuevos episodios de su vida profesional que desbloquear. “El sueño que aún tengo pendiente es hacer personajes complejos en una historia para la pantalla grande” dijo el actor, quien también afirmó que seguirá siempre apostándole a la versatilidad para seguir creciendo también de manera independiente.

Las cinco cosas que no sabías de Lalo España:

• Caricatura favorita: Don Gato y su pandilla.
• Algo que no tolera de otras personas: Que alguien violé los derechos humanos de otra persona.
• Si pudiera reencarnar sería en un niño feliz.
• Canción que lo hace bailar: "El listón de tu pelo" de Los Ángeles Azules.
• Algo que cambiaría de su forma de ser: Cargar tanto a las personas.