Piñatería Ramírez: la tienda de piñatas que protagonizó un divertido escándalo
Piñatería Ramírez es el nombre de una tienda de piñatas que hasta hace poco laboraba de manera normal. Es decir, realizaba su trabajo de forma sencilla, sin involucrarse en ningún escándalo. Menos en algún escándalo relacionado a un video sexual…
Todo eso quedó en el pasado y es que ahora, el dueño de Piñatería Ramírez enfrenta una posible demanda por haber hecho una piñata que, aunque es muy creativa (y divertida, la verdad) no fue del agrado del protagonista de esta figura. Bueno, basta de suspenso.
La historia de la Piñatería Ramírez
La historia comenzó cuando en internet se difundió un video íntimo del actor Gabriel Soto, quien también ha trabajado como modelo. En él, podía verse más de su cuerpo de lo que él hubiera querido y esto causó furor entre los usuarios de internet, que siguieron compartiendo el contenido sin temor a las consecuencias. ¿El problema? Compartir material íntimo sin consentimiento de la persona que aparece en él es un delito y puede pagarse con cárcel.
Así que con este antecedente, cuando la Piñatería Ramírez decidió aprovecharse del video viral para crear una piñata con la figura del actor, comenzaron los problemas.
Esta tienda se encuentra en Tamaulipas y vio en los hechos que estaban sucediendo una oportunidad de negocio. Y curiosamente le funcionó. La piñata con el cuerpo de Gabriel Soto se vendió muy bien al poco tiempo.
Sabemos que esto lo hicieron como una manifestación del característico humor del mexicano, que ve una broma en todo lo que sucede. Sin embargo, por este gesto, su dueño ahora enfrenta una posible demanda por parte del actor, quien ha pedido que dejen de compartir el video que lo expone y vulnera.
Por si esto fuera poco, el dueño del lugar mantuvo su humor y llevó el juego al límite. En sus redes sociales como Facebook publicó que él podría seguir fabricando sus productos desde la prisión e incluso compartió que también están a la venta unos pasteles para juntar la fianza.
¡Y todavía hay más! Como si todas las bromas que el dueño de Piñatería Ramírez ya había hecho sobre el caso de Gabriel Soto no fueran suficientes, remató diciendo que prometía dejar de fabricar este tipo de piñatas si el actor dejaba de producir discos. Hay gente que no le teme a nada y es capaz de todo por sacarnos unas cuantas risas.