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5 cosas que hemos aprendido de Doña Magda, de Vecinos

A doña Magdalena López Pérez de Angangueo le hemos aprendido varias cosas. Léete estos 5 tips de vida que el personaje de vecinos nos mostró.
Publicado 4 Dic 2020 – 04:10 AM ESTActualizado 25 May 2021 – 01:21 AM EDT
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Doña Magda es Macaria Crédito: Lo que hemos aprendido de Doña Magda

Magdalena López Pérez de Angangueo mejor conocida como Doña Magda en cada capítulo de Vecinos nos sorprende con su cinismo y necedad ante su situación económica. 

Con un esposo mandilón, una hija que heredó su cinísmo, un yerno flojo y un tierno nieto, Magdalena es uno de esos personajes que no te deja indiferente, o la odias o la amas. 

Por nuestra parte, Doña Magda nos ha enseñado 5 lecciones importantes durante todo el tiempo que la hemos visto en la serie. Toma nota ante estos tips.

Darse a respetar

Doña Magda siempre se da a respetar a dónde quiera que va y con quien sea que le hable. Nada de suegra, nada de abuela, nada de señora… Magdalena. Nombre completo aunque nos tardemos más. La dignidad ante todo, aunque todos opinen sobre tu vida. Siempre alza la cara, porque se te cae la corona. 

Hay que saber cómo ahorrar

La cabeza de los López Pérez sabe que la economía no es la mejor, así que siempre está viendo la forma de ahorrarse unos pesos en su gasto diario. Comprar cosas usadas, porque hay que apoyar el comercio local y al pequeño empresario, aceptar regalos incluso cuando sean para otra persona, pedir ayudas del gobierno para grupos vulnerables, tomar el internet de los vecinos, no pagar la cuota de gas, poner a franelear a tu nieto… Todo sirve.

Tener todo bajo control, hasta a tu marido

Magdalena no pierde el control de la situación. Aunque nos parezca curioso, la señora del último piso de los Vecinos obtiene lo que se propone (aunque eso nunca termina bien) y se debe a que tiene el coraje de expresar claramente sus deseos y actuar en consecuencia. De preferencia consiguete a alguien como su marido, que aguante tus caprichos. 

Conservar la apariencia hasta al final

Aunque te cachen en la mentira, tu continua como si te creyeras el cuento que te creaste. A Doña Magda le funciona, o al menos eso dice. 

Todo depende de cómo lo digas

Recuerda, la realidad se hace a través del lenguaje que usamos. No es un edificio viejo, es un patrimonio cultural, no es la azotea, es el penthouse, no es bañarse con cubetas sino un sistema de ahorro. No te niegas a pagar, solo no traes efectivo. ¡Aprende de Doña Magda!


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